Una reseña personal de los servicios de la Sra. Laterra

En 2020, los gobiernos de todo el mundo perdieron la cabeza por un supuesto virus. Sus acciones obligaron a muchos ciudadanos a considerar abandonar su país para ir a otro que consideraban más adecuado.

Para sortear los trámites burocráticos y el panorama cultural, muchos optan por recurrir a un agente de inmigración o un abogado en su país de destino.

Para quienes están considerando Paraguay, la agente Lorena Laterra apareció como una opción. Ella tiene un sitio web, las credenciales y el conocimiento necesarios para obtener la Residencia Temporal o Permanente en Paraguay. También brinda otros servicios.

Contraté a la Sra. Laterra para que me ayudara a obtener la residencia permanente a mediados de 2022. Una vez obtenida la residencia permanente, contraté a la Sra. Laterra para que me ayudara a obtener un plan telefónico, una licencia de conducir, una tarjeta de crédito y dos cuentas bancarias.

El objetivo de lo anterior era, con el tiempo, crear un caso para la naturalización. Una vez que el caso estuviera listo, la Sra. Laterra presentaría la solicitud en mi nombre. Se le pagaría una tarifa acordada en ese momento, pagadera en tres cuotas escalonadas.

Mientras tanto, se acordó que la Sra. Laterra haría los pagos mensuales regulares de mi plan telefónico y recibiría las tarjetas bancarias y de crédito. Luego, ella me entregaría toda la información bancaria y yo podría administrar y mantener las cuentas por mi cuenta a través de la banca en línea.

En aras de la brevedad, lo que ocurrió fue lo siguiente: con una excusa tras otra, nunca me entregaron la información bancaria ni las tarjetas. Nunca me proporcionaron pruebas de los pagos mensuales para mantener el plan telefónico. La Sra. Laterra luego se negó a compartir conmigo cualquier información sobre mi propio archivo.

Según la Sra. Laterra, todo estaba bien, mi cuenta bancaria y mis tarjetas de crédito estaban en orden, ella estaba haciendo los pagos mensuales de mi plan telefónico según lo acordado, pero mi archivo "no estaba disponible", yo estaba siendo irrazonable y, de hecho, ella estaba extremadamente sorprendida y decepcionada de que yo asumiera algo inapropiado.

Aproximadamente al mismo tiempo que esto ocurría, contrataron a la Sra. Laterra para que obtuviera la residencia permanente para mi hijo. Ella me quitó el depósito de solvencia de 5000 dólares estadounidenses, afirmó haberlo depositado en el banco designado y sostuvo que la solicitud de residencia permanente estaba en trámite, pero la resolución se retrasó. Todo esto, por supuesto, estaba fuera de su control.

Al final, como en mi caso, todo se estancó, la comunicación se volvió deficiente, pero según la Sra. Laterra, todo estaba "bien", yo estaba siendo irrazonable y ella no podía creer que yo pensara que algo extraño pudiera estar sucediendo.

Sin embargo, en el caso de mi hijo, la Sra. Laterra proporcionó "pruebas" de que había presentado la solicitud de residencia permanente de mi hijo y me invitó a investigar por mi cuenta si no le creía. Hice exactamente eso a través de otro canal.

El resultado fue que Migración manifestó que nunca se registró en el sistema de Migraciones ninguna solicitud de Residencia Permanente bajo ese nombre y número. Además, manifestaron que la firma del documento era falsa, tal como lo confirmó el funcionario mencionado.

El recibo (Tramite) también tenía el nombre de mi hijo, pero también los datos de mi pasaporte. Es una falsificación a menos que se demuestre lo contrario.

Después de comunicarme finalmente con mi banco en Paraguay, me quedó claro que había algunos problemas importantes. Problemas que la Sra. Laterra se negó a abordar. Problemas que el banco solo discutiría conmigo en persona.

Volé a Paraguay a principios de 2024 y, con la ayuda de un intérprete, hice la ronda. Fue impactante. En mi caso, mis dos cuentas bancarias estaban vacías, mi tarjeta de crédito estaba al límite y estaba en Cobranzas. Además, nunca se realizó un solo pago de mi plan telefónico.

En el caso de mi hijo, nunca se presentó la solicitud de residencia permanente. Nunca se depositó el depósito de solvencia de 5.000 dólares estadounidenses.

Simplemente había soportado años de mentiras, manipulaciones, manipulación psicológica, documentos falsificados, etc. y aprendí que yo era solo una de muchas víctimas.

Contraté un abogado y soy el caso número 3 contra la Sra. Lorena Laterra, mi "agente de confianza en Paraguay"